domingo, 4 de diciembre de 2016

INMIGRACION OKUPA Y JUSTICIA PATATERA


En este Blog he dicho, en mas de una ocasiòn , respecto a la okupaciòn que,  Tanto las actuales leyes como la ineficaz justicia que padecemos, son un filón inagotable para la imaginaciòn y la acciòn de los okupas, y una verdadera losa para el derecho de los propietarios.

La realidad supera a la ficción muy a menudo. Y en el tema de la okupaciòn los okupas por un lado y los jueces, por otro,  se superan día a día para confirmarlo.


Quien lo dude puede echar un vistazo al vídeo sobre estas líneas, o a la noticia que, entre otros medios publida el Diario "La razón" .

En el mismo se narran de forma sintética, aunque un poco confusa, las peripecias de unas propietarias que después de sufrir, como víctimas, el calvario de la okupaciòn por unos okupas venidos del otro lado del "Charco", con la lección bien aprendida, han terminado convertidos de victimas en delincuentes, por aprovechar el momento en que los okupas se habían ausentado de su propiedad, para tomar posesiòn de la misma .

Y lo cierto es que aunque kafkiano, todo ello tiene una base legal, aunque no por legal deja  de seer profundamente injusta.

Así, un mismo acto ( entrar en un inmueble sin habitantes en su interior ), sin violencia sobre las personas está penado, como delito de usurpaciòn con simple multa de 3 a 6 meses, cuando quien lo hace no es el propietario; mientras que ese mismo acto realizado por el propietario okupado, cuando el okupa no se encuentra en la vivienda, resulta penado, como delito de realización arbitraria del propio derecho con el doble de dicha pena ( multa de 6 a 12 meses ) .

Y esto, de forma sintética, parece ser lo ocurrido en esta ocasión, al tomar posesiòn las propietarias del piso que se encontraba sin habitantes, tras una larga okupación por por una familia marroquí, con mas morro que un oso hormiguero y que no dudó en denunciarlas y el juez de imputarlas ( hoy habria que decir, investigarlas, que suena mas fino ) . Haciendo con ello bueno el refrán que reza :

"De fuera vendrán que de casa te echarán".

Hechos como estos y otros semejantes, son los que, como gota malaya, van agotando la paciencia ciudadana  y construyendo el caldo de cultivo de eso que el cansino discurso progre ha dado en calificar peyorativamente como "xenofobia" y que en otros paises de Europa, supuestamente mas avanzados y de amplia tradiciòn democratica, está empezando a alcanzar cotas preocupantes. 

Y mientras tanto nuestros políticos, lanzandose patadas que, finalmente, terminan siempre impactando en el culo de los ciudadanos a quienes dicen representar y servir.  

Para hacerse el harakiri.