SOLIDARIDAD OKUPA QUE PAGAMOS TODOS .

Todavía calientes las ascuas del reciente incendio de un edificio en Badalona protagonizado por unos okupas rumanos, como consecuencia de una sobrecarga eléctrica motivada por un "pinchazo" irregular de fluido eléctrico, en el que murieron 3 personas y otras 30 resultaron heridas, nos desayunamos con otra pintoresca noticia publicada en la web de Telemadrid, en la que unos okupas con la luz "pinchada" fraudulentamente, prestan "solidariamente" esa luz ( aunque no se sabe si "altruistamente" o mediante algún tipo de contraprestación ) a otros okupas de un piso ubicado en un edificio situado frente al suyo. 

Los cables conectados, como Dios sabe quien les diò a entender, cuelgan atravesando la calle de lado a lado con el consiguiente riesgo que tal tipo de conexión supone, tanto para el edificio del "donante", como para el que okupa el receptor.

Desconozco en este momento si la situación persiste o si se ha tomado, bien por parte de la Compañía eléctrica suministradora o bien por alguna autoridad administrativa o judicial, algún tipo de medida para poner freno a esta kafkiana y tercermundista situación de peligro para una colectividad de vecinos. De no ser así como parece, a tenor de las manifestaciones de los vecinos afectados que se reflejan en el vídeo que se publica con la noticia, habrá que ir colocando a España entre la lista de países africanos. Porque, en un país que presuma de europeo se supone que estas cosas no deberían pasar. al menos sin consecuencias para sus autores. 

De que nos sirve tanta "modernidad" , tanto "progreso" y tanta farfolla como publica dia si y día también el B.O.E. si no somos capaces de dar solución rápida y eficaz a violaciones de las leyes tan evidentes , groseras y flagrantes, que suponen un ataque a dos derechos básicos reconocidos por nuestra constitución : El de propiedad y el de Seguridad.  

Que hecbos de este tipo sucedan, pone de manifiesto la sensación de impunidad con que se mueven los okupas, al saberse protegidos por unas inexplicables leyes y una menos explicable aplicación de las mismas , que facilitan, en grado sumo, tales acciones.

  

Las okupaciones se cuentan por miles desde hace muchos años, y los daños y perjuicios derivados de las mismas, traducidas en Euros,  por millones. Y todo ello sin que, hasta el momento se hayan adoptado medidas  tendentes a la defensa eficaz de los propietarios y a dar solución a  los múltiples problemas de todo tipo que causan las okupaciones, y sin que ni tan siquiera se vislumbren en el horizonte.

Si todos los miles de afectados y los millones de Euros perdidos por las okupaciones todavía no han sido suficientes  , ¿cuantos muertos seran necesarios para que nuestros políticos y gobernantes se sensibilicen con esta cuestión y se decidan a adoptar medidas eficaces para acabar con las okupaciones y todo lo que les cuelga , o al menos para lograr reducirlas a proporciones tolerables?.

¡Ah claro! de estos muertos y heridos no se llevan estadísticas. Pues ya va siendo hora.